La Luna es el único astro que forma directamente un sistema con la Tierra. Entre ambas existe un estrecho vínculo gravitacional, por lo que debemos considerar a los dos planetas como inseparables, tanto desde el punto de vista físico como astrológico. Este sistema doble, llamado GAIA, permite que en nuestro planeta se den las condiciones adecuadas para la existencia de vida tal como la conocemos. De ahí se deriva la ancestral transferencia simbólica Madre - Tierra - Luna.
Las horas se expresan en GMT, hora del meridiano de Greenwich.
Signos zodiacales, partes del cuerpo que rigen y meses en que coinciden fases y signos.
Sistemas orgánicos y partes de las plantas según elementos.
Los mejores días para estos trabajos son los dos o tres al mes en que la Luna recorre el signo de Virgo. Los peores, los días de signos de aire (Géminis, Libra y Acuario, sobre todo este último). Las fases lunares influyen en las plantas a la inversa que en el cuerpo humano. En Menguante la tierra absorbe y la savia baja a la raíz. En Creciente la savia sube y exhala.
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Alexander Volguine, Astrología Lunar. Buenos Aires. Ed. Kier, 1989
Johanna Paungger y Thomas Poppe, La Influencia de la Luna. Barcelona. Fontana Fantástica. Ed. Martínez Roca, 1993
Johanna Paungger y Thomas Poppe, Vivir con la Luna. Barcelona. Ed. Emecé, 1996.
José Luis S. Miguel de Pablos, Hijos de Urano y Gaia. Ed. Endrokos, 2002